EL PROCESO

PERSPECTIVA & VISION

¿Cómo luce el discipulado en la iglesia y en mi vida? ¿Qué significa esto de ser discípulo? ¿Cuál era la intención de Jesús al formar discípulos? Estoy emocionado y convencido que estos encuentros marcarán parte de tu vida. Bienvenido a:

Escuela de Vida III – Haciendo Discípulos.

El objetivo que tenemos para hoy es que la iglesia esté mejor equipada para cumplir con la misión que Jesús nos dio en hacer discípulos. Hoy quiero inspirarte con esta visión.

¿Por qué es tan importante que tengamos una visión clara y unívoca de cómo Jesús nos mandó hacer discípulos?

Muchas veces cuando compartimos la misión que Dios nos dio en el cuerpo de Cristo la mayoría de las veces salimos disparados en distintas direcciones. Llamamos hacer discipulado a muchas actividades, tenemos muchos lenguajes alrededor de esto y si bien esperamos lo mejor a veces se generan confusión entre lo que hacemos y deberíamos estar haciendo.

Nos parece que todas las iniciativas son buenas ideas, y muchas lo son, pero lo primero que tenemos que tener es UN LENGUAJE COMUN como iglesia al hablar de discipulado porque si no perdemos foco y mal utilizamos recursos sin lograr resultados concretos, y hacemos muchas cosas, pero no “aquello” que tenemos que hacer.

En esta etapa de madurez espiritual algo está cambiando y es trascendental. Es el hecho de pasar de ser solo discípulos a “HACER” discípulos.

Muchas veces nos imaginamos lo que es hacer discípulo de distintas maneras. Llamamos a una cosa Discipulado, otra Evangelismo, otra Ministerios, etc. entonces asociamos que el discipulado es una ACTIVIDAD en la Iglesia, cuando esto claramente no es así. Hacer discípulos es la misión suprema de la iglesia y de cada uno de nosotros, encomendada por Jesús.

Cuando confundimos los términos, entonces comenzamos a crear PROGRAMAS de discipulado que está relacionado con el hecho de cómo yo puedo ser un mejor discípulo, cuando Jesucristo nos pidió que nosotros HAGAMOS discípulos. Entonces, se supone que “YO” debo hacer discípulos y que ésta es mi responsabilidad (obviamente tenemos distintos dones dados por Dios a cada uno), pero “Todos estamos llamados a HACER DISCIPULOS”.

Si el cristianismo fuera una pintura, una obra maestra, ¿cómo luciría esta obra llamada iglesia?

Esta pregunta es muy importante porque a veces creemos que iglesia o hacer iglesia tiene que ver con el desarrollo de los programas dominicales, o que una asistencia creciente de personas en una congregación es reflejo de éxito y que haciendo esto estamos cumplimiento con la misión que Jesús nos dio.

No quiero decir que esto no sea algo importante, pero puede llevar al liderazgo a realizar actividades centradas en el desarrollo de un programa sin hacer discípulos y claramente errar el blanco.

¿Será que el cuadro que vemos de la iglesia tiene que ver con una Iglesia que adora a Dios? Claro que sí. Eso está bien, pero no es el cuadro final que Él nos dio. ¿Será que en esta foto de la Iglesia vemos hermanos cuidándose unos a otros en amor? Esto es bueno, pero tampoco es el todo de la Iglesia. Dios le dio a la Iglesia pastores, evangelistas, profetas, ¿para qué? Para construir el cuerpo, y este cuerpo se construye haciendo discípulos. Esto significa personas construyendo otras personas que construyen otras personas en el evangelio de Jesucristo.

¿Por qué es importante para Jesús hacer discípulos?

Él podría haber hecho todo sin los doce. A veces nos focalizamos en los grandes eventos del evangelio y no en la construcción de vidas. Jesús invirtió en discípulos, los preparó, los dejó que hagan y luego los dejó solos. El transformó la historia de esas personas y la historia del mundo con esas personas.

Cuidado! Nosotros vemos esa construcción como algo aburrido y los milagros como algo fascinante, y es absolutamente todo al revés.

Jesús podría haberles pedido a los ángeles que hagan muchas cosas, que hagan milagros y maravillas. Podría haber hecho llover estatuas que hablen y evangelicen, pero no lo hizo y no lo hace. ¿Por qué? Él tiene la misión de construir personas, de que éstas compartan el reino. Esta es una obra de misericordia, y es tremendo! Gracias Señor.

Hacer discipulado es el corazón de lo que Jesús quiere hacer.

Y….¿Cómo podemos hacer para tener un corazón para hacer discípulos?

Nos enamoramos primero de Dios. Si lo amo tanto, quiero agradarle, satisfacerle. Se trata del amor. Se trata de hacer esto primero.

Creo que todos aquellos que estamos en Cristo queremos hacer discípulos, pero muchas veces no sabemos cómo hacerlo. Nadie lo ha hecho con nosotros. ¿Cuántos hemos tenido la posibilidad de tener una persona que nos guíe con una guía espiritual? Dios nos está dando sabiduría en esto.

¿Cuántos de Uds. tuvieron personas que intencionalmente los han discipulado? ¿Qué experiencia tienen al respecto?

Me gustaría que puedas reflexionar en estos días sobre este llamado. No se trata solo de seguirlo a Jesús sino de lo que Jesús nos está pidiendo hacer. Vayan y hagan discípulos.

¿DE QUE SE TRATA?

Bienvenido una vez más a este espacio donde estamos reflexionando respecto a cómo HACER discípulos.

Me gustaría que escribieras a continuación. Desde tu punto de vista ¿Qué es un discípulo?

Como decíamos en la sesión anterior. Es muy importante que todos estemos de acuerdo en lo que significa ser un discípulo y cómo podemos hacer discípulos para no desfocalizarnos, y trabajar unidos como Iglesia del Señor.

¿Cuál es la definición de discípulo? La sacamos de la biblia.

En Mateo 4:19 dice “Vengan y síganme y los haré pescadores de hombres”.

Quiero abrir este texto en tres aspectos fundamentales que toca este pasaje.

Dios nos llama a seguirlo (Vengan…)
Los haré algo (Implica un cambio…)
Les doy una misión (Pescadores de hombres…)

Vamos a seguirlo, vamos a cambiar y vamos a alcanzar a otros. Para esto se requiere no solamente reconocer a Jesús como Salvador sino como Señor de nuestras vidas. Veamos bien que implican estos pasos.

CABEZA

Seguirlo significa tomar una decisión. Cuando Dios es Señor y no solo Salvador entonces ponemos todo a nombre de Él y vivimos alrededor de Él. Esa es la decisión importante que podemos hacer en nuestras vidas. Mucha gente sabe un montón, pero sus vidas no están siendo transformadas. Solo se quedaron con Jesús el Salvador.

CORAZON

Seguirlo significa un cambio en nuestro corazón. Ya no soy lo que era. Perdono más, comienzo a dar frutos a nivel espiritual, soy más generoso, critico menos, tengo más gozo, juzgo menos. En otras palabras, crecer en Cristo no se trata de adquirir información sino del corazón. Tener un corazón moldeable.

Muchos desean que sus corazones sean transformados, pero aquí es donde se presenta una TENTACION o RIESGO IMPORTANTE que es el creer que saber más produce cambios, y esto no es así.

MANOS

Seguirle significa hacer su voluntad. Hay mucho por hacer y por ayudar. Necesitamos no solo comunicar el evangelio sino ayudar al pobre, a la viuda, a los desamparados. Esto es algo natural en un discípulo, que lo hace sin esperar un programa de la iglesia para hacerlo. Jesús dijo que un día dirán “Señor, Señor en tu nombre echamos demonios, sanamos enfermos” y que El los rechazaría. ¿Por qué? Porque las acciones no llevan a la salvación, sino que la salvación produce estas acciones.

Seguirlo, cambiar y entrar en su misión. ¿Cómo estás en estos aspectos en tu vida espiritual?