COMO EL ESPIRITU NOS GUIA


LECCION 9

TEXTO BASE: Juan 16:13 y Romanos 8:8-17

CÓMO EL ESPIRITU NOS GUIA

Podemos creer que caminar en el espíritu es no andar en pecado e ir a la iglesia los domingos; pero ser guiados por el espíritu es mucho más que eso, es vivir una vida sobrenatural, es caminar en el espíritu a diario.

MIREMOS A JESUS

Fue concebido por el Espíritu Santo, pero al mismo tiempo necesitaba ser bautizado con el Espíritu Santo.

Cuando Jesús fue bautizado por Juan, el Espíritu Santo posó sobre él (Lucas 4:1-2). “Entonces lleno del Espíritu Santo fue llevado por el espíritu…” dice el texto. ¿Qué significa esto? Cuando te bautizas y eres lleno del Espíritu Santo, El comienza a guiarte en la vida, podemos experimentar vivencias con El, vivimos en Dios.

Aun así, aunque lleno del Espíritu, Jesús tomó tiempo en el desierto para estar a solas en intimidad con Dios.

En Lucas 6:12-13: Justo antes de elegir a sus discípulos se dirigió a la montaña a orar y nuevamente vemos como Jesús es guiado por el Espíritu Santo en la elección de los discípulos. Jesús necesitaba estar tiempo con Dios, orar y ayunar. A nosotros nos pasa y pasará también lo mismo si es que queremos caminar en el poder del Espíritu Santo.

EL ESPIRITU SANTO HOY

A veces tenemos muchos programas que nos ocupan tiempo y no dependemos del Espíritu Santo. En el libro de Los Hechos vemos cómo el Espíritu Santo era parte de todo lo que hacían. En Hechos 6:3-6 menciona “….hombres llenos del E.S….”. Dios quiere utilizar personas llenas del Espíritu Santo, y es lo que tenemos que imitar con nuestras vidas (Hechos 5:32; 8:29; 10:19; 13:2; 15:28; 16:6; 19:21; 20:22).

Cuando buscamos la guía del Señor, entonces la recibimos, en la mayoría de las veces con pensamientos de Dios. Lógicamente no se puede saber con un 100% de certeza que Dios es quien habla, porque entonces no sería por la fe. Dios pone un pensamiento y nosotros tenemos que intentar. De esta manera de a poco vamos reconociendo la voz de Dios hasta que se hace familiar, como cuando una persona conocida nos habla por teléfono.

Hay que practicarlo una y otra vez, pero siempre hay que dar un paso por la fe. La forma en que podemos aprender es por el ejercicio diario de la obediencia a la voz de Dios.

¡Cuidado! El diablo también puede hablar a nuestra mente, por eso tenemos que conocer bien la Palabra de Dios. Si estamos todo el día escuchando televisión, o radio, o música, habrá muchas voces en nuestra mente y costará reconocer cuando Dios sea quien nos esté hablando.

Necesitamos más tiempo con Dios.

 

 

GUIADOS POR EL ESPIRITU SANTO

LECCION 10

LA JUSTICIA DE DIOS – EL AMOR DE DIOS

TEXTO BASE: Romanos 6

Entendamos quien es Dios y cómo debemos vivir con Él.

¿Cómo se revela Dios a nuestras vidas? Algunos comienzan con la revelación de Dios como Padre, debido a sus antecedentes; a otros se les revela como Santo y cambian sus vidas. Ambas cosas son necesarias.

En otras palabras, son necesaria la Justicia de Dios y el Amor de Dios. La justicia de Dios tiene que ver con que Dios es justo y juzgará al mundo. El amor de Dios, en que Dios es amor y tiene misericordia.

El entender la justicia de Dios nos ayudará a no vivir en pecado, a vivir sin licencia para pecar. El amor de Dios nos ayudará a no vivir una vida legalista (hacer cosas para merecer el amor de Dios)

 

NECESITAMOS EQUILIBRIO

No es una cosa o la otra, las dos son necesarias.

Si solo entendemos el amor de Dios, una mala comprensión nos puede hacer vivir una vida de pecado, porque terminamos diciendo “No importa lo que haga, Dios me ama”. Por otro lado, si solo comprendemos la justicia de Dios, es fácil que vivamos una vida legalista. Para vivir en el centro del amor y la justicia, tenemos que tener conocimiento de ambas cosas.

EL AMOR DE DIOS

Romanos 5:8 nos dice que como pecadores nos podemos ir al infierno, pero Dios ama al pecador y le da oportunidades. PERO, si no se arrepiente se va a ir al infierno, porque Dios es justo.

Los primeros discípulos predicaban más la justicia de Dios, porque hay que entender primero la justicia de Dios para entender el amor de Dios.

En San Juan 3:16, uno de los versículos más citados de la biblia nos dice mucho del amor, pero a veces está mal utilizado o entendido. Para entender bien el versículo 16 tenemos que leer los textos anteriores donde Jesús nos habla del pueblo de Israel. Los israelitas en el desierto se quejaban y Dios se enojó con ellos y mandó serpientes que los mordieran, y muchos murieron, pero al mirar la serpiente de bronce no morían. Así que, de la misma manera como Dios amó a los israelitas amó al mundo, entonces envió a su Hijo para que el que en él crea no se pierda. Dios mira al mundo y no dice “los amo y me encanta todo lo que hacen”. El amor de Dios es santo y solo podemos entenderlo por el Espíritu Santo (Romanos 5:5).

LA JUSTICIA DE DIOS

Hay iglesias que predican mucho del amor de Dios y no tanto de la justicia de Dios, por eso muchos no ven la necesidad del arrepentimiento. Por otro lado, hay iglesias que dan mucho énfasis a la justicia de Dios, pero no predican el evangelio completo de arrepentimiento y esperanza. Solo teniendo el amor de Dios se puede predicar el evangelio correcto.

Predicar la justicia de Dios no es enviar a la gente al infierno, sino que comprendan que son pecadores que necesitan arrepentimiento. Si dejas que el pecado entre en tu vida, el amor de Dios se enfría, pero si te arrepientes de corazón, el amor de Dios será como un fuego.

1 Cor. 2:12 dice: “Nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino e espíritu que procede de Dios, para que entendamos lo que por su gracia él nos ha concedido”. La gracia no es una licencia para pecar, es el poder dentro de nosotros para vivir la vida que Dios quiere que vivamos.

Actuemos en amor, con la verdad y bajo la guía del Espíritu Santo.